Once relatos constituyen el vals de unos monstruos que no tienen una deformidad física, sino mental, y con esa premisa danzan al unísono sin otorgarnos un solo momento de sosiego...
Once relatos constituyen el vals de unos monstruos que no tienen una deformidad física, sino mental, y con esa premisa danzan al unísono sin otorgarnos un solo momento de sosiego...