(adsbygoogle = window.adsbygoogle || []).push({}); Vladimir Villalobos López Mientras volvía de las tortillas, me atravesó la idea de que aún no termino de dimensionar la edad que tengo. Me asomé al reflejo de una camioneta y me creí el mismo que cuando en casa me mandaban por tortillas —a veces al mercado de la esquina, a veces a cinco minutos de camino porque estaban mejores allá, ordenaba convencida mi mamá—. Claramente recuerdo haber pensado que, como dice la canción, es sólo una cuestión de actitud; pero bastó prestarme atención (los reflejos deforman) para reconocerme otro, empezando por la rodilla derecha,...